Hacer buenos negocios no es algo que solamente hagan las grandes empresas. Tu también puedes hacerlo. En el mundo moderno existen varias formas de establecer tus propios emprendimientos y hacerlos crecer. Te traemos 7 ejemplos de buenas prácticas que debes seguir para establecerte como emprendedor.
Muchas veces pasa que a la hora de emprender, a tu idea o proyecto la consideras como si fuese tu propio hijo y por ende, crees que nadie lo conoce mejor que tú. Pero muchas veces se pasa por alto el hecho de que los demás no tienen por qué estar familiarizados con él ni entender exactamente de qué se trata.
Para esto debes prepararte para poder contar claramente y de forma resumida de qué se trata tu emprendimiento. Y además debes anticiparte a todas las preguntas que puedan hacerte. Esto lo lograrás poniéndote desde la perspectiva de otra persona. Solo así estarás preparado de antemano ante un posible cliente, inversor o periodista, por ejemplo.
Comercializar tus productos o servicios puede ser una tarea difícil cuando no planificas una campaña de marketing. Esto puede resultar un poco intimidante, pero es algo totalmente necesario. Para ello te recomendamos poner toda tu creatividad para esto y ser lo más organizado posible. Comienza de a poco y sé constante
Deja todo anotado y ten en cuenta cuanto quieres gastar, en qué plataformas virtuales quieres estar presentes y medios tradicionales si es que quieres y necesitas.
Actualmente vivimos en la era de la información. Sin embargo, con tantos datos a nuestro alcance puede ser confuso elegir bien qué es lo que te puede servir y que no. Es por esto que debes analizar aquellas herramientas que te signifiquen una ventaja y utilizarlas a tu favor. Siempre habrá algunos recursos que tengas a tu alcance o que ya poseas y que puedan ayudarte a minimizar tus esfuerzos.
El equipo de personas que conformes debe ser el mejor posible. Es prácticamente imposible llegar lejos solo. Debes rodearte de los mejores recursos humanos. Busca gente creativa, que piensen distinto a ti y sobre todo confiables. Que crean en tu proyecto y que se animen a contradecirte si creen que estás equivocado.
Lo peor que puedes hacer es encerrarte en tu propia visión y tomarte personales las críticas que recibes. Tampoco debes hacer de ellas la base de tu accionar. Es necesario que encuentres un balance justo. Aprende a escuchar todas las voces, sobre todo las que no hablan bien de tu producto, tu forma de hacer las cosas y tus ideas. Todas las críticas constructivas te harán crecer muchísimo.
Es recomendable ir a entrenamientos y a eventos relacionados a tu sector. Conocer a personas que tengan intereses afines a los tuyos y generar lazos que puedan terminar en potenciales colaboraciones. Por suerte, las conexiones personales aún son muy importantes.
Nunca sabes dónde podrá estar tu próximo cliente o inversor. Es por eso que el networking te ayudará a crecer tu negocio, a que la gente te recuerde a ti y a tu empresa cuando surja la necesidad.
Establecer contacto con periodistas o personas influyentes en los medios e internet es una gran oportunidad para que se dé a conocer lo que haces. Preséntales tu proyecto o envíales gacetillas de prensa para que se pongan en contacto contigo.
Esperamos que estos consejos te sean de utilidad y que sean un granito de arena en la construcción del negocio de tus sueños. Recuerda que lo más importante es nunca bajar los brazos. Si tú crees en tu idea, nada es imposible. Trabaja duro y nunca te rindas. Los resultados llegarán solos.
DONGFENG - TU CAMINO AL ÉXITO
